A este conjunto de síntomas se lo denomina como el síndrome del domingo, especialmente por la tarde, y se potencia en los meses de otoño e invierno donde el clima frío y gris favorece estados melancolizantes. Además se produce cierta sensación de vacío si no podemos satisfacer las expectativas en relación a nuestro tiempo libre, que a veces no sabemos utilizar a pleno.
En el síndrome del domingo, caracterizado por la inactividad y la desmotivación, muchas veces afloran conflictos personales que habilitan un espacio de introspección y reflexión. Otro factor psicológico es pensar en el día lunes, donde las personas anticipan la rutina agitada y el estrés cotidiano de enfrentar la semana laboral. Se centran en los acontecimientos negativos que les deparará y se pre-ocupan del futuro inmediato, no permitiendo disfrutar del presente.
Hay que tener en cuenta que los fines de semana se alteran los hábitos del sueño y la comida, siendo importante mantener un equilibrio y la voluntad de vencer la pereza y el hastío q produce el domingo, disfrutándolo como un día que posibilite poder elegir con libertad organizando actividades relacionadas con el placer y los afectos.
El hecho de estar solo el domingo requeriría ser tratado como un tema aparte donde se potencia el sentimiento de soledad y sus consecuencias particulares que pueden llegar hasta la depresión, y allí estaríamos hablando de una patología y no de sensaciones.
Por lo contrario para muchos puede convertirse en un día ideal para disfrutar con la familia, amigos, descansar o hacer aquello que nos gusta.
Hay que tener en cuenta que los fines de semana se alteran los hábitos del sueño y la comida, siendo importante mantener un equilibrio y la voluntad de vencer la pereza y el hastío q produce el domingo, disfrutándolo como un día que posibilite poder elegir con libertad organizando actividades relacionadas con el placer y los afectos.
El hecho de estar solo el domingo requeriría ser tratado como un tema aparte donde se potencia el sentimiento de soledad y sus consecuencias particulares que pueden llegar hasta la depresión, y allí estaríamos hablando de una patología y no de sensaciones.
Por lo contrario para muchos puede convertirse en un día ideal para disfrutar con la familia, amigos, descansar o hacer aquello que nos gusta.
Autor: Lic. Carlos Tryskier
MN: 45097
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